Si nos preguntasen si lo volveríamos a hacer, no sabríamos muy bien qué contestar. Nos gusta apostar fuerte por las ideas. Pero, en confianza, no somos una agencia que se suela sentir especialmente cómoda chapoteando en la controversia, y este era uno de esos proyectos que se te pueden ir de las manos. Sin embargo, de pocas campañas estamos tan orgullosos desde un punto de vista creativo como lo estamos de Discover Satanism. Por su atrevimiento, por su originalidad, por el profundo homenaje que encierra a la obra de Polanski, por lo creíbles que están las interpretaciones, por el cariño en cada texto… De acuerdo, quizá haya algo de vanidad en este análisis, pero, ¿quién está realmente a salvo de las debilidades con las que nos tienta el diablo? Sobre todo en publicidad.
Un poco de contexto. 40 aniversario de La Semilla del Diablo, una de las obras cumbre del cine de terror. Con su retrato coral de aquellos encantadores inquilinos del edificio Dakota que resultaban ser adoradores de Satán, Polanski consiguió llevar el terror a lo más cotidiano y aparentemente inofensivo. Así que vimos la oportunidad de hacer un homenaje igualmente blanco y naïve.
Rodamos en Londres una serie de breves testimoniales en los que los protagonistas contaban las razones de su devoción por Satán e invitaban a la gente a conocer un poco más en la web discoversatanism.com. Una vez dentro del microsite – que tenía el diseño aséptico y luminoso que uno espera más encontrar en la web de Apple que en una sobre culto satánico – se animaba a la gente a normalizar el satanismo como una opción más en la que creer.
Un verdadero 360º que nos permitió generar contenido sobre la película y toda la leyenda que la rodea durante varias semanas.
Por cierto, lo volveríamos a hacer. Faltaría más.
Si has visto la luz tras ver esta campaña, escríbenos.